Descripción

El mayor acierto de esta obra radica en su capacidad para describir con precisión la mediocridad de su tiempo, identificando síntomas que, sorprendentemente, siguen vigentes en la actualidad. Por ello, su lectura continúa siendo esencial para quienes buscan ir más allá del conformismo y analizar con objetividad las razones que los impulsan a perseguir sus ideales en una sociedad dominada por la mediocridad.

José Ingenieros desarrolla en el libro una serie de reflexiones filosóficas centradas en la tensión entre dos funciones sociales opuestas: por un lado, la normalidad, representada por el hombre mediocre, y por otro, la innovación, encarnada por aquellos individuos dotados de una sensibilidad y un talento excepcionales, quienes, con su creatividad, impulsan el desarrollo de la civilización.

El autor realiza una crítica precisa a la falta de carácter, al conservadurismo extremo y a la rutina que sofoca el pensamiento independiente. Además, señala cómo la envidia, la deshonestidad y la arrogancia se oponen a los valores propios del idealismo, como la dignidad y la honorabilidad. A través de este análisis, Ingenieros no solo denuncia los defectos de su época, sino que ofrece una reflexión atemporal que sigue interpelando al lector actual

<< Todos no se extasían, como tú, ante un crepúsculo, no sueñan frente á una aurora ó cimbran ante una tempestad; ni gustan de pasear con Dante, reir con Molière, temblar con Shakespeare, crujir con Wagner; ni enmudecen ante el David, la Cena ó el Partenón. Es de pocos esa inquietud de perseguir ávidamente alguna quimera, venerando á filósofos, artistas y pensadores que fundieron en síntesis supremas sus visiones del ser y de la eternidad, volando más allá de lo Real. Los seres de tu estirpe, cuya imaginación se puebla de ideales y cuyo sentimiento polariza hacia ellos la personalidad entera, forman raza aparte en la humanidad: son idealistas.>>